Un vehículo terrestre no tripulado (UGV, por sus siglas en inglés) en medio de un campo activa sus sensores y detecta qué manzanas están maduras y listas para ser cosechadas. Una vez que se acerca, la toma y la deja en una cesta sin estropearla. Esta tecnología con Inteligencia Artificial y big data podría revolucionar el mundo de la agricultura.
Desde la empresa israelí Tevel Aerobotics Technologies aseguran que su tecnología es una solución ante "la grave escasez de mano de obra que tienen los productores de todo el mundo para atender sus frutos; lo que afecta profundamente la productividad, la eficiencia y los costos agrícolas". De hecho, se estima que a nivel global se pierden unos 30.000 millones de dólares al año por toda la fruta que se pudre al no ser cosechada a tiempo.
Experiencia internacional
Además de Israel, la tecnología de Tevel ha sido probada por Chile, Estados Unidos y Europa. En Italia han trabajado con Rivoira Giovanni & Figli, uno de los grupos de fruta más importantes de dicho país. El CEO Marco Rivoira destaca que "los algoritmos permiten ser muy precisos: detectas el color, programas el peso de la fruta que quieres coger. Puedes identificar la calidad de los árboles y seleccionaros automáticamente". La gerenta de Marketing y Comunicaciones de Tevel, Danielle Efargan Hager, complementa: "Contamos con un software muy avanzado que muestra a los productores datos en tiempo real sobre cada pieza de fruta recolectada, incluido el peso, tamaño, nivel de madurez, clasificación de color, geolocalización, diámetro y mucho más".