La seguridad en el espacio aéreo para volar drones está en un proceso de transformación. Uno de los puntos en los que la evolución ha avanzado más es en la detección de sistemas aéreos no tripulados. Actualmente, cualquier ciudadano que disponga de un smartphone puede identificar UAS gracias a aplicaciones desarrolladas para este fin. Esta función es posible cuando el sistema dispone de capacidades de identificación remota incorporadas, un requisito que en ubicaciones como Estados Unidos es obligatorio para muchos de los modelos comerciales.
Una de las últimas empresas en lanzar una app de detección de drones ha sido Airsentiel.ai, especializada en inteligencia del espacio aéreo. Air Sentiel permite identificar la ubicación, altitud de la aeronave y estación de control e incluso ubicación de despegue. Entre la información que recoge la app también se incluye la matrícula digital, ruta de vuelo.
El codirector ejecutivo de Airsentinel, Alan Erickson, ha explicado tras su presentación que el objetivo de democratizar la seguridad del espacio aéreo y ha asegurado que es una opción favorable para entidades privadas y públicas. "Las empresas privadas pueden beneficiarse enormemente de nuestra aplicación al proteger sus instalaciones de intrusiones no deseadas de drones, proteger la propiedad intelectual y garantizar la seguridad de sus operaciones. Las organizaciones de seguridad pública y las ciudades también pueden usar la aplicación para controlar las actividades de los UAS en sus jurisdicciones, mejorando la seguridad y minimizando las amenazas potenciales", apuntó.
La compañía no es la primera en proporcionar una app para este tipo de funciones. De hecho, en 2019, DJI, una compañía china conocida en el sector comercial de sistemas no tripulados, lanzó Direct Drone-to-Phone. Esta aplicación consta de una cámara con la que puedes apuntar a un dron. De este modo, se empiezan a procesar datos como la ubicación, el rumbo o la ubicación del piloto.
La privacidad del operador
Precisamente, la capacidad para detectar la ubicación del operador abrió un debate sobre la posible invasión de la privacidad del usuario tras la presentación de Direct Drone-to-Phone. En este sentido, Airsential trata de desmarcarse de esta polémica. Uno de sus fundadores, Kenji Sugahara, aseguró que Air Sentiel satisface las necesidades de seguridad "respetando a los operadores", y señaló que no revela las ubicaciones de los pilotos a los usuarios que no registrados.
Otra de las compañías que se sumó al mercado de la detección de sistemas no tripulados fue Drone Scanner. En 2022, la entidad lanzó una plataforma para Android e iOS con capacidades similares a las mencionadas anteriormente. Esta dispone de un mapa desarrollado con la ubicación del UAV propio y la de otros usuarios. Además de datos sobre la altura y la dirección, la app aporta una descripción de la operación y un historial de ubicación de la aeronave seleccionada.
La App móvil protagonista en la guerra
La evolución en la detección de drones a través del móvil ha llegado también a la guerra entre Rusia y Ucrania. El país invadido, ante la amenaza constante de ataques masivos de sistemas no tripulados rusos, especialmente con Shahed 136, drones suicidas, decidió crear la plataforma Eppo.
Eppo funciona de manera que permite apuntar con la cámara del móvil hacia el dron y pulsar un botón rojo para guardar la ubicación e identificar el sistema. La aplicación fue desarrollada por la empresa Technari Design Group con la colaboración de las Fuerzas Aéreas del Sur de Ucrania, para facilitar la detección de objetivos militares que son difíciles de localizar con un radar. Especialmente, se centra en drones que operan a baja altitud.
El sistema requiere identificarse con el servicio electrónico del país. Los informes que generan los ciudadanos son revisados por especialistas en defensa aérea que, junto a las indicaciones de los radares de la zona, intentan interceptar la amenaza en cuestión.