El Gobierno del Reino Unido busca desarrollar un sistema antidrón de tipo hardkill para uso no militar

A través de un aviso de información previa en forma de solicitud de información (RFI por sus siglas en inglés), el Gobierno del Reino Unido está recopilando información sobre el potencial del mercado de tecnología de defensa, con el objetivo de desarrollar un sistema antidrón (C-UAS) con capacidades de muerte dura o hardkill de uso no militar. Las autoridades de contratación considerarán las opiniones de la industria sobre los requisitos, con miras a garantizar que éstas se tengan en cuenta para futuras adquisiciones.

La National Police Counter Drones Unit (NPCC) está coordinando esta iniciativa con equipos nacionales, interoperables mediante ayuda mutua para todas las fuerzas del Ministerio del Interior (Home Office). La Policía de Escocia, el Servicio de Policía de Irlanda del Norte, la Policía del Ministerio de Defensa, la Policía Nuclear Civil, la Policía de Transporte Británica y la Agencia Nacional contra el Crimen también han validado los principios establecidos en el modelo nacional, que en el futuro estará cubierto por la práctica profesional autorizada (APP) Counter Drones de la Facultad de Policía para el despliegue, formación y uso de equipos de lucha antidrón. 

El efector cinético buscado deberá poseer contramedidas de parada dura, pero también podría permitir la captura y recuperación física de los drones. Debido a su funcionamiento, estos sistemas pueden clasificarse como armas de fuego, por lo que su uso operativo es limitado y, en algunos casos, queda restringido a oficiales de armas de fuego autorizados (AFO). Para esta solicitud de información, los efectores cinéticos incluyen “municiones para armas de fuego o plataformas existentes, así como sistemas de puntería para armamento inteligente”.

La necesidad de un nuevo C-UAS de uso no militar se basa en el aumento de la popularidad de los sistemas aéreos no tripulados para desempeñar distintas funciones, tanto legítimas como ilegales. Estas últimas pueden incluir, entre otras actividades, el transporte de artefactos explosivos improvisados (IED), el espionaje por vídeo, la violación de la privacidad o el transporte de mercancías de contrabando. Los efectores cinético de tipo hardkill puede utilizarse para contrarrestar este uso descuidado, desconsiderado o delictivo de los drones, como dispositivo autónomo o como parte de un conjunto de sistemas de detección mayor.