La Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos ha autorizado a Pyka para que su modelo Pelican Spray pueda operar vuelos comerciales. Con su envergadura de 11,5 metros y 599 kilos de peso máximo de despegue y aterrizaje, se convierte en el UAV más grande en recibir dicho reconocimiento.
La aeronave ha sido construida pensando en un uso en la agricultura industrial. De hecho, en los vídeos promocionales de la compañía se muestra rociando campos y se jactan de que puede cubrir más de 60 hectáreas por hora reduciendo un 15% el uso de químicos. Soporta una carga máxima de 317 kilos y 318 litros de volumen líquido.
Además de un certificado de operador de aeronaves agrícolas, esta aprobación de la FAA permite a Pyka comenzar operaciones comerciales en los Estados Unidos, brindando, según sus desarrolladores, "beneficios económicos, ambientales y de seguridad sin precedentes para los agricultores estadounidenses y el público en general". De acuerdo a las cifras presentadas, sólo en 2020, la Junta Nacional de Seguridad en Transporte (NTSB) informó de 54 accidentes de aeronaves que involucraron operaciones agrícolas, incluidos 12 accidentes fatales que resultaron en 13 muertes.
Vale la pena mencionar que el dron de pulverización agrícola ya está operativo en Costa Rica, Honduras y Brasil. Sin embargo, pese a todos los avances, apenas tiene una resistencia de 30 minutos (más otros diez de reserva), lo que lo obliga a necesitar recargas eléctricas constantemente.
Valoraciones positivas a la decisión de la FAA
"La acción de la FAA para autorizar las operaciones de Pyka significa el compromiso de la agencia de permitir operaciones agrícolas más grandes y avanzadas que salvarán vidas y promoverán el liderazgo estadounidense en el mercado global de drones de 60.000 millones de dólares", dice la compañía en un comunicado oficial.
El director ejecutivo de Pyka, Michael Norcia, aseguró que "esta aprobación comercial es el primer paso que nos permite generar un valor masivo para los productores en los Estados Unidos, América Latina y otros mercados en los que operamos, al tiempo que sienta las bases operativas y regulatorias para escalar eventualmente a operaciones de carga no tripuladas en todo el mundo".
Por otro lado, la socia y presidenta de Práctica de Sistemas de UAV de Hogan Lovells, Lisa Ellman, comentó que "entre otros beneficios ambientales y de seguridad, el uso de UAS altamente automatizados como el Pelican para realizar operaciones de aeronaves potencialmente peligrosas puede reducir la cantidad de muertes de pilotos que ocurren cada año en la industria de fumigación agrícola aérea".