La Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable Galicia VII, conocida como Brilat, espera superar este verano ampliamente los 40 vuelos con aeronaves no tripuladas realizados el año pasado sobre los bosques gallegos para prevenir incendios. La Consellería de Medio Rural anunció el pasado julio un nuevo convenio de colaboración con el Ministerio de Defensa en la lucha contra el fuego en el que, por primera vez, según anunció, se incluiría el despliegue de drones.
En realidad en la campaña 2015 la Brilat ya desplegó sus RQ-11 Raven con este cometido sobre ese territorio. En total completaron 40 vuelos. El objetivo de la actual campaña, conocida como Centinela Gallego e iniciada el mes pasado, es superar notablemente esa cifra. El sargento primero Salgado, que es el militar al frente de estos equipos, ha explicado a La Voz de Galicia que estas pequeñas aeronaves fabricadas por la norteamericana AeroVironment y que el Ejército español empleó durante su despliegue en Afganistán, les permite mantener un ojo en el cielo volando “en un radio de diez kilómetros de donde nos asentemos, y entre sesenta y noventa minutos” de autonomía.
Su uso sobre las áreas forestales de Galicia supone la primera vez que se emplean en España sobre un escenario real, más allá de los correspondientes ejercicios militares. De esta forma, además de colaborar en el combate contra los incendios para “ver en zonas en las que no tendríamos posibilidad de ver si no fuera por los Raven”, su uso permite a la Brilat mantener activas sus habilidades para desplegar estos sistemas donde sea necesario.
Los RQ-11 Raven son unas aeronaves remotamente pilotadas (RPA) de lanzamiento manual y aterrizaje vertical por pérdida de sustentación de 1,4 metros de envergadura y 1,9 kilos de peso. Su altura operativa supera ligeramente los 300 metros sobre el suelo y es capaz de alcanzar una velocidad próxima a los 60 kilómetros por hora.
Para realizar sus misiones de reconocimiento y vigilancia dispone de hasta 200 gramos en distintas cámaras, incluidas infrarrojas.
Imagen: Ejército de Tierra / Twitter