Marruecos adquirió recientemente drones kamikaze a Israel Aerospace Industries por valor de 22 millones de dólares y, en respuesta, su vecino Argelia ha adquirido un nuevo sistema de guerra electrónica para detectarlos. El dispositivo fue visto a finales del año pasado por primera vez.
El sistema recibe el nombre de Guerra Electrónica Integrada y está fabricado por las empresas chinas Elinc y Ceic. Está desarrollado a partir del LDK-190 y se utiliza para detectar emisiones de radar y radio enemigas hasta a 600 kilómetros de distancia. A pesar de la poca información que hay hasta la fecha, esta nueva tecnología no debe confundirse con el sistema de interferencia antiaérea CHL-903.
El dispositivo es defensivo y ofensivo y es capaz de determinar la posición, identificar y clasificar las emisiones enemigas a distancias de 600 km así como proteger los radares y los sistemas antiaéreos de los misiles antirradiación confundiendo las frecuencias del radar.
Características del sistema
Del mismo modo, entre sus capacidades engloba también el bloqueo de las comunicaciones a 300 km. Por otro lado, impide el uso de sistemas de posicionamiento por satélite GNSS (GPS, Baidu, Galileo, Glonass) con interferencias de 0,5 a 40 GHz y detecta aviones y barcos furtivos así como drones. La cuestión es que además de detectarlos, en este último caso, puede eliminar su enlace con la base de control.
Recientemente, el Frente Polisario denunció la muerte de una docena de civiles en bombardeos con drones y quizás sea por esto que Argelia, aliada de los saharauis, se haya decidido a adquirir estos sistemas.