La Agencia de Adquisiciones y Apoyo de la OTAN (NSPA) ha aprobado recientemente el primer acuerdo marco internacional en la historia de la Organización destinado a la adquisición de sistemas contra drones de pequeño tamaño, más conocidos como C-sUAS. El contrato, cuyo plazo de ejecución inicial es de tres años, ha sido adjudicado a través de la distribuidora de defensa Cobbs Belux BV a las compañías DroneShield y MyDefence, que suministrarán respectivamente las soluciones antidrón Dronegun Mk4 y Wingman.
El acuerdo marco se empezó a gestar el pasado mes de septiembre durante el Ejercicio de Interoperabilidad Técnica de Sistemas de Lucha Contra Aeronaves no Tripuladas (C-UAS TIE 23), que reunió en los Países Bajos a distintos especialistas militares e industriales con el fin de validar las capacidades de nuevas tecnologías C-UAS y poner de manifiesto las carencias de la OTAN y sus Estados miembros en este ámbito.
Partiendo de los resultados obtenidos en este ensayo, la NSPA inició el proceso de desarrollo del acuerdo con el objetivo de "abordar una brecha de capacidad emergente en el sector de los drones militarizados mediante el suministro de equipos capaces de detectar y neutralizar pequeñas amenazas basadas en sistemas aéreos no tripulados, que han crecido exponencialmente en los últimos años". La iniciativa ofrece, además “una prestación única de servicios de arrendamiento, adquisición y logística”, al permitir a los usuarios finales probar los equipos y evaluar sus necesidades operativas antes de comprometerse con la adquisición final de los mismos.
La misión principal de la Agencia de Adquisiciones y Apoyo es actuar como intermediaria en los mercados, vinculando las capacidades de los diferentes agentes de la industria con las necesidades detectadas por los miembros de la OTAN, para justificar la adquisición de soluciones eficientes asignadas a tareas de defensa nacional y colectiva. Los esfuerzos referentes a la ejecución del acuerdo marco también se alinean con otro de los objetivos prioritarios de la NSPA: "obtener el servicio o equipo de mayor calidad y al mejor precio, mediante la consolidación de los requisitos de múltiples naciones de una manera rentable, a través de asociaciones de soporte".
Con esta estructura de apoyo, exclusiva de la Agencia de Adquisiciones, los estados brindan “gobernanza y orientación”, mientras que la NSPA “desarrolla capacidades y gestiona una amplia gama de requisitos”. En este modelo, el marco legal ofrece un soporte común y eficiente y permite, además, la consolidación de economías de escala y la reducción de los costes generales y la huella logística del proceso.
Por otro lado, para que una compañía sea invitada a una licitación y su oferta potencial sea evaluada y considerada para su adjudicación, es necesario que se registre en el archivo fuente de la NSPA, que se configura como “una base de datos centralizada que contiene información de proveedores pasados, presentes y potenciales, incluidos datos sobre su rendimiento”. De esta forma, el proceso garantiza que se mantenga la libre competencia, estimulando la competitividad económica y la oferta de una gama más amplia de productos y servicios.