DJI, Parrot e Intel incrementan su poder en el sector de los drones

Los líderes mundiales en sistemas aéreos remotamente pilotados (RPAS), DJI SA, Parrot e Intel Corporation, están aumentando su red de adquisiciones y asociaciones con otras empresas para ganar poder en el mercado. El infográfico que acompaña esta información refleja los movimientos realizados por las tres firmas en los últimos años; principalmente a qué otras compañías han absorbido y con cuáles han establecido nuevas alianzas.

El cuadro, realizado por la compañía investigadora y analista de mercados alemana Drone Industry Insights (DII), especifica el subsector concreto de cada compañía: hardware, software o servicios relacionados. “El mercado de drones puede describirse hoy en día como un crisol de diferentes tecnologías, donde se combinan componentes de hardware y software y servicios que son suministrados al usuario final”, explican los responsables de DII.

En este mercado “extremadamente rápido” en sus cambios, “resulta esencial mantener estrategias de alianzas o invertir en una sólida cartera de UAV (vehículos aéreos no tripulados, por sus siglas en inglés)”. Es un fenómeno que acompaña al sector de sus inicios. Lo llamativo, a juicio de la firma alemana, es comprobar como los líderes de la nueva industria han estado recientemente muy ocupados “participando en nuevas asociaciones con otras empresas, buscando nuevas oportunidades de inversión y realizando adquisiciones”.

La francesa Parrot, en concreto, se adelantó a las demás al emprender estas estrategias en una etapa muy temprana –siempre teniendo en cuenta la escasa historia con la que cuenta el sector–. En 2012 adquirió el fabricante de software Pix4D y en 2014 hizo lo propio con MicaSense, allanándose el camino para ofrecer soluciones avanzadas completas. Estos movimientos se produjeron en un momento en el que los márgenes de beneficios en el mercado comercial de los UAV eran muy pequeños, lo que acentúa su esforzada apuesta por hacerse un hueco importante en el mercado. De este modo, la actividad en el sector de los drones de la primera compañía de dispositivos de manos libres del mundo ha ganado un peso considerable recientemente, al pasar de suponer el 38 por ciento de su actividad en el primer trimestre del año al 58 por ciento en el segundo.

En el caso de la estadounidense Intel Capital, sus inversiones en la industria de los drones se iniciaron tres años después que las de Parrot. En 2014 comenzaron estos movimientos para la firma. Ahora, Intel Corporation es muy proactiva componente dentro del mercado, en el que adquiere aquellas piezas que le faltan para constituir una sólida oferta en esta tecnología.

A principios de este año, por ejemplo, se hizo con la fabricante alemana de aeronaves no tripuladas Ascending Technologies, con la que ya había establecido alianzas anteriormente. En todo caso, el movimiento más importante de Intel en el tablero de juego, a juicio de DII, fue la compra de la compañía de procesadores de visión móvil Movidius. Con esta adquisición la firma se abre el camino más allá de los vehículos aéreos no tripulados hacia los sistemas directamente autónomos.

Por cierto que otros fabricantes de chips como Intel han copiado su estrategia al ver las oportunidades que les ofrece convertirse en proveedores de tecnología para la industria de los drones. Es el caso de Qualcomm y de Nvidia, ambas también de Estados Unidos.

La tercera empresa líder del sector, la china DJI, que es la mayor de todas, ha comenzado este año su verdadero afán por asociarse con otras compañías que le son útiles para seguir creciendo en el segmento de los RPAS. Entre ellas se encuentran el fabricante de cámaras infrarrojas FLIR, el reconocido experto Leica GEosystems y el fabricante UAvionix de micro transpondedores ADS-B. El estudio a partir del que se ha elaborado el cuadro considera muy positiva esta estrategia, teniendo en cuenta que DJI ya tiene todo lo que necesita para hacer volar sus drones. No precisa adquirir tecnología, por tanto, pero asociarse con otras firmas le sirve para ampliar conocimientos, entre otras ventajas.

Imagen: DII