La Guardia Civil ha creado el Equipo Pegaso para el control de drones después de años dedicados al estudio del uso y control de las aeronaves pilotadas por control remoto.
En diciembre de 2017, entró en vigor el Real Decreto 1036/2017 por el que se establecían las obligaciones y las responsabilidades de los pilotos y usuarios de este tipo de vehículos aéreos. El auge de los drones en España solo ha hecho que aumentar en los últimos años y es una de las industrias con mayor crecimiento dentro del tejido tecnológico español.
Desde 2015, la Guardia Civil trabaja con Unidad Fiscal y Aeroportuaria de la Comandancia de Madrid para el estudio de estas aeronaves y por ello consideran que este equipo recién formado supone "un aporte esencia" en el asesoramiento técnico a sus agentes.
La Guardia Civil destacó que con la proliferación de los drones se han ocasionado diversos incidentes que "han afectado a la operativa aérea tradicional, generando un riesgo potencial y causando una sensación de inseguridad en los diferentes usuarios del espacio aéreo" y alarmó de la falta de concienciación y desconocimiento" de las reglas de circulación aéreas tante de pilotos profesionales y recreativos.
Los agentes han observado que la mayoría de las irregularidades que comenten los usuarios son la falta de documentación, la ausencia de placas identificativas en las aeronaves o pilotar a distancias inferiores a las permitidas en los aeródromos sin acuerdos de coordinación.
El Equipo Pegaso participó en el control y vigilancia del festival Summer Story 2018, que tuvo lugar en la localidad madrileña de Arganda del Rey, para "aumentar la seguridad de los asistentes al evento".