Marichka: el nuevo UUV con el que Ucrania atacará a la Armada rusa

La organización Ammo Ukraine, autodefinida como una fundación benéfica sin ánimo de lucro, ha mostrado en acción, a través de un vídeo publicado en sus redes sociales, el prototipo de un UUV (Unnmaned Underwater Vehicle) de fabricación cien por cien ucraniana, denominado Marichka (en español, María).

Desde el inicio de la invasión rusa, la Armada de Ucrania ha tenido una capacidad muy limitada, tanto en ataque como en defensa. Esta coyuntura ha sido aprovechada en numerosas ocasiones por la Armada rusa, que ha liberado todo su potencial armamentístico en devastadores ataques con misiles de crucero contra enclaves militares y áreas civiles de la costa ucraniana.

El desarrollo de este nuevo vehículo submarino no tripulado se enmarca dentro de los intereses que el Gobierno de Ucrania y sus FFAA están realizando por aumentar su presencia naval en el Mar Negro, con el objetivo de evitar los continuos ataques de los buques y submarinos rusos y de frenar la invasión por la frontera marítima oriental del país.

UUV de ataque y reabastecimiento

El Marichka tiene un factor de forma cilíndrico, diámetro de un metro y longitud total de seis metros. Está fabricado con materiales robustos, similares a los que se pueden encontrar en submarinos nucleares, para poder operar a bajas profundidades sin sufrir daños por la alta presión.

Según Ammo Ukraine, dos de las características más importantes de este UUV son su gran capacidad de carga, que le permiten trasportar hasta 100 kilos de explosivos; y su elevada autonomía, de más de 1.000 kilómetros, pudiendo así operar en cualquier punto del Mar Negro.

Con este dron submarino, la Armada ucraniana podrá realizar dos tipos de misiones: ataques contra barcos, infraestructuras marítimas y puentes, utilizándose como un UUV kamikaze; y labores de logística y reabastecimiento de naves aliadas, aprovechando su autonomía, capacidad de carga y sigilo.

En busca de financiación

El Marichka está todavía en una fase de desarrollo inicial y tendrá que pasar por muchas pruebas antes de ver la luz en el campo de batalla y de convertirse en el nuevo talón de Aquiles de la flota rusa.

A través de su página web, la organización Ammo continúa solicitando financiación externa de inversores internacionales y particulares, para poder seguir trabajando en el proyecto y entregar lo antes posible esta tecnología a las Fuerzas Armadas de Ucrania.